No todo es color de rosa con la tecnología. En primer lugar, muchas tecnologías son utilizadas con fines bélicos. Además, otros riesgos pueden surgir de su impacto desmedido en nuestra cultura y nuestra forma de relacionarnos socialmente, e incluso las consecuencias políticas que de ciertas invenciones pueden derivarse.
Por ejemplo: la energía nuclear descubierta en el siglo XX permitió el desarrollo de reactores nucleares que llevaron energía eléctrica barata y limpia a muchos rincones del mundo.
Sin embargo, también permitieron la construcción de armas atómicas como las arrojadas sobre las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki en la Segunda Guerra Mundial.
No hay comentarios:
Publicar un comentario